Capítulo 14 - El juicio

El diario de Mia

Capítulo 14  

El juicio

Abril 2012

A pesar de los múltiples intentos de Christian y mi padre por cambiar la fecha hasta después de que Ana diera a luz el juez ha decidido no cambiar la fecha del juicio del cabrón de Jack Hyde, aun después de varios meses y de estar entre rejas, ese hombre sigue alterando nuestra vida.

Esta semana ha sido una locura, no solo por el ir y venir de abogados, entre el abogado que contrató Christian y mi padre me están volviendo loca, sino también por la prensa. Los paparazzi vilmente nos están acosando, todos los periódicos y revistas quieren tener una declaración o una fotografía nuestra. Mi asistente ha tenido que filtrar todas mis llamadas y citas, haciendo que mi trabajo sea aún más complicado, y por primera vez agradezco tener escolta personal, pues cada vez que salgo así sea a comprar un café, hay algún fotógrafo siguiéndome.

Esta semana la revista ‘People’ publicó en su portada ‘La vida de los Grey’, haciendo énfasis en que un matrimonio entre un abogado y una doctora, ambos gozando de prestigio y dinero adoptan a tres afortunados niños, publican fotos de la casa en que viven mis padres, del Escala, de la nueva casa de Christian desde el aire, además fotos de Grey House, la constructora de Elliot y de todos nosotros, además haciendo hincapié en que todo queda en familia,  pues Elliot y yo estamos comprometidos con hermanos; además de las declaraciones de una supuesta amiga de la familia contando cosas intimas de la familia, tengo la impresión de que la reina del hielo abrió su boquita y que pronto recibirá la visita de Carrick Grey. Y ni que decir de la historia tan espeluznante que publico el ‘National Enquirer’ haciendo no sé cuántas conjeturas sobre la vida ‘secreta’ de Christian, inventando una historia sórdida sobre un comportamiento sexual bastante exótico, en comparación con la vida más normal, aunque libertina de Elliot.

También han salido a la luz algunos detalles que hubiéramos preferido que quedaran en familia, como el hecho de que Christian y Hyde provienen de provienen de Detroit y que ambos estuvieron en el mismo hogar de acogida mientras mis padres seguían el trámite para su adopción. Y de cómo el destino los unió nuevamente cuando Ana comenzó a trabajar en SIP, hablan de que Christian compró la empresa, e inevitablemente de mi secuestro y su participación en mi rescate.

Aun no puedo creer que mi cuñada sabiendo que estaba embarazada se expusiera a tanto peligro por mí, no solo arriesgando su vida sino también la vida de mi sobrinito que aún está por nacer. Siempre le voy a estar agradecida por eso, Ana no solo cambió la vida de mi hermano, también estoy segura que salvó la mía.

Ethan ha sido un encanto, y sin duda ha estado poniendo en práctica sus conocimientos de psicología en mí, he estado teniendo pesadillas últimamente, y algunos problemas de ansiedad, así que mi prometido, me encanta como suena esa palabra, me ha estado enseñando algunas técnicas de relajación, aparte que es el mejor oyente del mundo, me siento muy aliviada cuando me despierto por la noche y él está ahí para abrazarme y tranquilizarme, definitivamente no hay mejor remedio para el estrés que hacer el amor.

Esta tarde Christian nos citó a todos en su casa, así que ahí vamos, camino a lo que será una reunión familiar, tenemos que ponernos de acuerdo sobre algunos aspectos del juicio, aunque siendo totalmente sincera lo que más espero es verlos a todos y darles un abrazo, sé que suena totalmente sensiblero y hasta cursi, pero necesito a mi familia, si tuviera que pasar por todo esto sola, no sé qué haría.

Cuando llegamos a casa de mi hermano mis padres ya están ahí, y Kate y Elliot llegan pocos minutos después que nosotros, así que después de saludarnos vamos directo al grano y parece que la atención se centra en la reportera de la familia.

“Kate sabemos que es tu carrera, y que en el periódico tienen ciertas expectativas contigo por tu vinculación a la familia, pero queremos pedirte que algunas cosas se mantengan solo en el ámbito familiar.” Comienza mi padre mientras mi madre le lanza una de sus miradas matadoras, creo que a veces le falta un poco de tacto.

“Carrick te aseguro que mi jefe entiende totalmente mi posición con respecto a la familia, pero también creo que sería una muy buena oportunidad para aprovechar y contar la historia como realmente ocurrió, de cómo este hombre acosó a Ana en su trabajo, y se aprovechó del poder que tenía sobre ella, y que intentó usar eso como defensa.” Argumenta Kate.

“Creo que sería una buena idea, pero me gustaría leer el artículo antes de que se lo enviaras a tu jefe,” contesta Christian.

“Christian en un mes voy a convertirme oficialmente en miembro de tu familia, ¿de verdad crees que haría algo para perjudicarlos? En verdad me molesta mucho que tengas tan mal concepto de mí.”

Christian se toma algunos minutos para contestar, creo que está intentando controlar su temperamento, Kate y él no son los mejores amigos precisamente. “Kate creo que eres muy buena en tu trabajo y que tienes buenos instintos, pero también creo que por la misma pasión que sientes por lo que haces es fácil que te dejes llevar, es por eso que quiero leer el artículo.” Replica mi hermano. “Además ten en cuenta que serias la voz de la familia, creo que simplemente es lo justo.”

“Está bien, creo que podemos llegar a un acuerdo. Me gustaría hacer la publicación justo antes de que se dicte sentencia.”

“Me parece el momento perfecto,” Interviene mi padre.

Y solucionado esto pasamos a temas un poco menos espinosos, como la logística para nuestra llegada mañana a la corte. Christian y mi padre han conseguido que nos dejen entrar por el estacionamiento privado, para entrar en los juzgados directamente esquivando la entrada principal y por ende el acoso de la prensa. Aunque ambos están de acuerdo en que en algún momento todos deberíamos salir unidos mostrando que somos un frente común.

Después de cenar nos despedimos, el juicio comienza mañana muy temprano y sin duda todos necesitamos relajarnos y descansar.

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Al llegar a nuestro apartamento Ethan me lleva de la mano directamente hasta nuestra habitación, me deja sentada en la cama y se dirige al baño. Escucho el sonido del agua en la bañera, poco después sale solo en boxers, y se arrodilla enfrente de mí. Lentamente sube mi falda hasta llegar  hasta mi liguero y suelta una a una las medias, amorosamente acaricia mis piernas y las medias caen sin cuidado alguno en el suelo. Le sigue mi blusa, luego me toma una vez más de la mano y me ayuda a levantarme. Mi falda y mi ropa interior pronto le hacen compañía a mis medias en el suelo, mientras Ethan me lleva hasta la bañera.

“Relájate Princesa, déjate consentir, solo déjate llevar.”

“Mmm, eso es tan fácil.”

Y así entre burbujas y el olor a Fresia mis preocupaciones se desvanecen, definitivamente es mucho más fácil sobre llevar las dificultades cuando tienes a alguien que te ama de verdad a tu lado. Por primera vez en mi vida estoy experimentando esa sensación y me encanta.

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A las seis y media de la mañana suena el infame despertador, ha llovido toda la noche y parece que el día de hoy no va a ser diferente, el cielo está completamente gris, el mar se ve revuelto y oscuro. ¿Sera un augurio de lo que está por venir? Por favor Dios, cuida de nuestra familia, ya hemos tenido bastante.

Ethan se despierta justo después que yo y al verme inmóvil sentada en nuestra cama se preocupa y me abraza, diciéndome al oído palabras tranquilizadoras.

“Ethan lo que más me preocupa, es que es la primera vez que los voy a ver después de todo lo que paso, ellos van a estar ahí.”

“Si Princesa, ellos estarán ahí, pero yo estaré a tu lado, tomándote de la mano, estaremos juntos enfrentando esto mi amor, no te preocupes. Aparte de que ese imbécil estará esposado y no podrá acercarte a ti, estará custodiado en todo momento.”

“¿Y si se escapa? He sabido de algunos casos.”

“Mia no creo que eso vaya a ocurrir, además según tengo entendido después del disparo que Ana le dio en la pierna a Hyde no quedó muy bien, así que no es muy hábil físicamente, no podría escapar fácilmente de los guardias. No te preocupes por eso Princesa, deja de darle vueltas a ese asunto.”

“Tienes razón, intentare relajarme.”

“Además acuérdate de todo lo que hemos hablado, sé que no te es fácil, pero debemos enfrentar de una forma lógica lo que nos pasa, darle a las cosas un enfoque dialectico, no estás en peligro mi amor, tranquilízate.”

“Está bien,” le digo mientras le beso los labios suavemente. “¿Qué quieres desayunar?”

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Diez minutos antes de las nueve de la mañana nos encontramos todos en el estacionamiento que nos han asignado. Parece que la ansiedad no solamente anda rondando en nuestra casa. Ana y Christian también se ven algo cansados. Aunque mi cuñada comenta que el bebé ha estado bastante movidito estos días y que se siente cada vez más exhausta. Pobre Ana, enfrentar el juicio en tu octavo mes de embarazo ha de ser terrible, sin duda esto no está siendo muy fácil para ella.

Cuando por fin entramos en la sala siento que voy caminando casi mecánicamente, sino fuera porque la mano de Ethan me guía, no se a dónde hubiera ido a parar. Mientras el guardia guía a Hyde a su lugar siento su mirada fija en nosotros, no le quita los ojos de encima a mi hermano, lo mira con tanto odio. Ese hombre tiene una mirada penetrante, de esa que hace que tiemble hasta el tuétano.

“Tranquila Princesa, estas temblando,” No me había percatado de que fuera así. “Aquí estoy contigo, Hyde está custodiado, no puede hacer nada en tu contra. Sientes mi mano, ¿puedes sentir mi amor?”

Me limito a asentir con la cabeza, no puedo hacer nada más.

Luego en completo silencio escuchamos los alegatos de presentación del caso y sé que cada vez está más cerca el momento de testificar. Han pasado algunos meses desde entonces, pero aun siento que el pánico me recorre de pies a cabeza como un relámpago.

El juez ha decidido suspender la sesión después de los alegatos iniciales y volveremos a las tres de la tarde, lo que nos da tiempo para ir a almorzar. Pero francamente no creo que en este momento pueda pasar algún alimento por mi boca.

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Volvemos a la sala de audiencias a la hora señalada y soy la primera persona de mi familia en ser llamada a rendir su testimonio. Es horrible recordar todo eso, solo quiero que esto termine. Afortunadamente como  somos testigos llamados por parte de la fiscalía nos corresponden los primeros turnos para declarar, así la pesadilla acabará mas rápido. Al mal paso darle prisa, dicen por ahí.

Llega el momento y me dirijo al estrado, se siente frio ahí, es como estar sola y sentirte totalmente vulnerable, y lo peor es que siento sus ojos clavándose en los míos, como agujas calientes.

Respondo las preguntas de la forma más concisa que puedo, tal y como me instruyeron mi padre y el fiscal, afortunadamente para mí todo pasó tan rápido, no creo que hubiera podido soportar estar más tiempo en cautiverio, es una sensación horrible.

El abogado defensor no me hace ninguna pregunta. Después de mi testifica Elizabeth Morgan, quien era la encargada de recursos humanos en SIP y la cosa se pone que arde. Resulta que Hyde tuvo sexo con ella y la chantajeaba con unos videos que le tomo a escondidas. Ella ha accedido a colaborar con la fiscalía a cambio de una condena más indulgente. Aunque ella fue quien me abordó en el gimnasio, quien materialmente me secuestró la he perdonado, creo que fue una mujer débil intentando proteger la poca dignidad que le quedaba, aunque no estoy de acuerdo con sus métodos, no sé qué habría hecho yo de estar en su lugar.

El abogado encargado de la defensa de Hyde ha intentado desacreditar su declaración haciéndola ver como una amante furiosa ante el desaire del objeto de su deseo, intentando cualquier cosa por agradarlo, incluso ha insinuado que fue ella quien se ofreció para secuestrarme. Esa teoría es rápidamente desestimada ante la prueba contundente de los videos y algunos correos electrónicos que intercambiaron, además, la Srta. Morgan tuvo la inteligencia de grabar algunas de sus llamadas en su teléfono móvil.

Ciertamente Hyde es un hombre espeluznante, es un violador en serie y creo que de haber tenido la oportunidad también sería un asesino, tiene toda la sangre fría necesaria para eso.

El turno para que Christian y Ana pasen al estrado queda para mañana, el testimonio de la Srta. Morgan se ha alargado más de lo que tenían planeado y hoy no hay tiempo para más. Solo espero que después de eso podamos darnos un respiro y centrarnos en lo que es realmente importante, la próxima boda de Elliot y el nacimiento de mi sobrinito. Creo que eso nos ayudará a pasar este trago amargo, francamente necesitamos no uno, sino varios respiros.

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A la mañana siguiente de nuevo nos encontramos todos en el estacionamiento de los juzgados y nos encaminamos hacia la sala de audiencias. Después del ritual de entrada del jurado el juez reanuda el juicio, que afortunadamente se está llevando a cabo a puerta cerrada, sin la presencia de la prensa.

Como primera cosa en el orden del día mi hermano Christian es llamado a declarar, y después de prestar su juramento, el fiscal encargado comienza el interrogatorio.

Christian relata cómo fue el primer encuentro con Hyde, y como desde el primer momento notó que era un ser frio y dominante, cosa que es objetada por la defensa alegando que es una apreciación personal y no un hecho demostrado, el fiscal alega que Christian simplemente ha contestado la pregunta que se le hizo y el juez lo deja pasar. No ha dado a lugar a la objeción.

Luego Christian relata que cuando Ana comenzó a trabajar en SIP ellos estaban separados, aunque él ya había iniciado las negociaciones para apropiarse de la empresa, pues su principal objetivo era que su entonces novia trabajara en un ambiente seguro, también relata cómo después del primer intento de secuestro en contra de Ana, Christian mandó a su jefe de seguridad a Detroit a investigar y descubrieron la conexión entre ellos, también relata como su jefe de IT descubrió que Hyde tenía en el ordenador del trabajo información y fotografías de todos nosotros. Definitivamente quedan claras las intenciones de Hyde, la alevosía con la que actuó y la premeditación.

Termina la sesión de preguntas por parte de la fiscalía y comienza el interrogatorio por parte del abogado defensor.

“¿Sr. Grey es cierto que usted y su guardaespaldas atacaron al Sr. Hyde en la cocina de SIP?” Pregunta el abogado con una desfachatez digna de su cliente.

“No, ni el Sr. Taylor ni yo atacamos al Sr. Hyde en la cocina de SIP, simplemente le dejamos claras las cosas.” Contesta Christian tranquilamente.

“¿Y qué métodos utilizaron para dejar las cosas claras, como usted mismo ha dicho?”

“Los adecuados.”

“Sr. Grey por favor responda la pregunta.”

“Si quiere que responda a sus preguntas sea claro y pregunte lo que desee que le conteste.”

“Sr. Grey.” Advierte el juez.

“Retomemos la pregunta inicial, ¿golpeó usted a mi cliente en la cocina de SIP? ¿Golpeó usted a mi cliente estando en el suelo después de haber sido atacado por su ahora esposa?”

“Primero Sr. Abogado debemos dejar claro que mi esposa, la señora Grey no atacó a su cliente, ella simplemente se defendió de su ataque y su acoso. En cuanto a si golpee a Hyde si lo hice, y creo que nadie podría culparme por hacerlo. Hyde quería violar a Anastasia, y lo habría hecho de no ser porque mi esposa sabe defenderse.”

“Sr. Juez,” Interviene el fiscal. “El Sr. Grey no está siendo juzgado por agresión, aquí simplemente el abogado de la defensa está intentando distraer la atención de lo que es realmente importante. El acusado trazó un plan para perjudicar a la familia Grey y se aprovechó de la influencia que tenía en ese entonces sobre la Sra. Anastasia Grey al ser su jefe.”

Entonces el juez llama a ambos abogados a acercarse al estrado y les dice algo que los demás no podemos escuchar, pero por la cara de mi padre puedo deducir que todo va bien, que no debemos preocuparnos, por lo menos no todavía.

Luego es el turno para testificar de Ana, y la pobre se ve agotada. Desearía que ella no tuviera que pasar por esto, pero una vez el cabrón de Hyde sea condenado todos podremos respirar tranquilos.

Ana comienza relatando su entrevista de trabajo y sus primeros días. Dice que desde siempre Hyde la hizo sentir incomoda, que siempre invadía su espacio personal y hacía preguntas inadecuadas, pero que todo llego al punto de ebullición cuando se frustró su viaje a NY para asistir a una convención, pues mi hermano levantó una moratoria sobre los gastos de SIP y Hyde podría viajar, pero solo, sin la compañía de Ana, cosa que lo enfureció y provocó el ataque en la cocina de la empresa.

También relata cómo fue el día en que recibió la llamada de Hyde pidiéndole dinero a cambio de mi libertad y como la amenazó diciéndole que si le decía algo a mi hermano me violaría antes de matarme. No puedo evitarlo y me estremezco nuevamente.

Una vez más cuando es el turno del abogado de la defensa este intenta hacer creer a todos que Ana provocaba a Hyde con una actitud descarada y coqueta, pero cualquier persona que conozca a Ana sabría que ella es más bien tímida y dulce, y que está locamente enamorada de mi hermano, lo ha estado desde que lo conoció, y desde entonces no tiene ojos para nadie más.

Me encanta la frase que utiliza el fiscal para desestimar ese argumento. “Recordemos, damas y caballeros, que una mujer sea cual sea su condición, su trabajo o su personalidad siempre puede decir que no, y eso un hombre debe respetarlo.”

El juez da a lugar la objeción y siento que mi cuñada vuelve a respirar. Es indignante que el defensor si quiera se atreviera a argumentar que Ana fue merecedora de ser agredida sexualmente por el imbécil de Hyde porque ella lo provocó. Vamos ni en las culturas más machistas un argumento como ese es admisible.

Y así termina el día y todos estamos visiblemente agotados, y aunque el juicio apenas empieza ya no será necesaria nuestra presencia. Mi padre está seguro que terminará pronto, pues si el abogado de Hyde es inteligente intentará llegar a algún tipo de acuerdo, pues cuantas más trabas pongan para la sentencia seguramente esta será mas dura.

Con lo que no contábamos fue con lo que sucedió días después.

Mi padre nos llamó a todos a una reunión por la noche en su casa a la que todos deberíamos asistir sin falta. Y tal como nos pidió a las seis de la tarde estábamos todos ocupando nuestros lugares en la sala de mis padres.

Sin rodeos mi padre nos dice el motivo de su llamada.

“Hyde está alegando una incapacidad psicológica como causa para eximirse de responsabilidad penal en el secuestro de Mia y el chantaje a Anastasia.”

“¿QUÉ?” Dice Christian sobresaltado levantándose de su lugar, sin duda dando voz a lo que todos los demás pensamos.

Ethan pasa su brazo por mis hombros intentando tranquilizarme, debe haberse dado cuenta de mi estremecimiento. Esta no la vimos venir, Hyde es un tipo listo y no va a darse por vencido sin luchar.

“¿Qué sabemos hasta ahora?” Pregunta Elliot intentando esclarecer el asunto, ciertamente todos estamos desconcertados.

“Solo sabemos que el abogado de la defensa ha pedido que un perito psiquiatra evalúe a Hyde, así que será sometido a exámenes para determinar si es imputable y en qué grado.”

“Llamaré a Flynn,” inmediatamente interviene Christian sacando del bolsillo de su chaqueta su BlackBerry.

“Christian,” dice Ethan acercándose a donde está mi hermano y mi padre. “Me gustaría también hablar con Flynn y con el fiscal. Aunque estoy a la mitad de mi master, pienso que les puedo ayudar, la psicología criminal es un área que me ha interesado desde hace mucho tiempo, y aunque no es mi especialidad creo que entre todos podemos hacer un buen equipo.”

 “Estoy de acuerdo hijo,” enseguida contesta mi padre, poniéndole la mano en el hombro a Ethan. “Eres parte de esta familia y sin duda tu más que nadie estará interesado en el bienestar de Mia.”

Es alentador en medio de esta pesadilla sentir el amor de mi prometido, es muy importante para mí en estos momentos. Ethan se ha convertido en mi roca y se lo agradezco, creo que en este momento no podría amarlo más.

“Flynn estará aquí alrededor de las ocho de la noche, creo que sería buena idea hablar también con el fiscal y preguntarle que tiene en mente.” Dice Christian.

“Eso había pensado, enseguida me pongo en comunicación con él,” dice mi padre alejándose de nosotros.

Kate no ha dejado de caminar de un lado a otro del ventanal, mi madre está sentada a un lado de Ana intentando que se sienta mejor, al igual que mi hermano. No es bueno ni para ella, ni para el bebé pasar por toda esta angustia. Yo lo único que deseo es que esto termine tan pronto como sea posible, deseo pasar página cuanto antes.

Acordamos todos quedarnos a dormir esa noche en casa de mis padres. Poco después llega Taylor con el equipaje de todos. Ese hombre es una maravilla, no sé cómo puede encargarse de todo, esta situación sin duda también le está afectando a él porque aprecia mucho a mi hermano y de alguna forma se ha convertido en parte de nuestra familia.

Mi suegro llama muy preocupado, también se ha enterado de alguna manera de lo ocurrido y quiere saber si puede ayudar en algo. Mi padre le dice que no es necesario que venga y que sin duda la mejor forma de apoyarnos en este momento es formando un frente común y permaneciendo tranquilo. No quiere que la situación se agrave porque alguno de nosotros ha sufrido un infarto o un colapso nervioso.

Mi madre decide que es mejor mantener al margen a los abuelos de estas noticias porque solo lograría angustiarlos, y a su edad eso no es bueno.

Parece que esta noche nadie puede dormir, todos estamos dando vueltas por la casa, paseando por la cocina o caminando por el jardín. Christian y Ana salieron hace rato hacia el cobertizo. Es bueno para ellos refugiarse ahora en un lugar que les trae buenos recuerdos, y seguramente encontraran en la privacidad que les ofrece alguna forma divertida de relajarse.

Mi padre, mis hermanos, Flynn y Ethan han acordado que solo ellos se presentarán mañana en el juzgado. El fiscal dice que seguramente el juez ordenará que se suspenda el juicio en lo que realizan las pruebas psicológicas y tanto la parte defensora, así como la fiscalía, tendrán tiempo de solicitar más exámenes y evaluar los resultados.

Y tal como el fiscal Reagan había predicho resulta ser. El juez ha dado un plazo de quince días hábiles para que se realicen las pruebas, pero también ha dado autorización a que uno o varios médicos cualificados, que sean elegidos por la parte acusadora puedan evaluar a Hyde. Creo que eso resulta muy tranquilizador, porque seguramente Flynn tomará las riendas del asunto. Es bueno tener un rayo de luz en medio de la oscuridad que se ha cernido sobre nosotros a causa de toda esta angustia.

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 No soy dueño de ninguno de los personajes de la trilogía de "Cincuenta Sombras".  Pertenecen a E L James. Estoy simplemente tomando prestados los personajes para entretenimiento y no por beneficio económico. 

Con agradecimiento a GP968 por su ayuda y apoyo para escribir este blog.

Mi agradecimiento a GE Griffin por guiarme y permitir inspirarme en su maravilloso trabajo. http://christiangreyspanish.blogspot.com/